El proyecto del Unicaja para la próxima campaña se revisará

La continuidad del equipo de baloncesto del Unicaja en la ACB no está en cuestión. Tanto su propietario, la Fundación Unicaja, como su principal patrocinador, Unicaja Banco, mantienen su apuesta por el conjunto que más títulos ha dado al deporte malagueño. Sí están en negociaciones el proyecto deportivo para la próxima temporada y el presupuesto final. También cuál será la aportación de cada uno de sus impulsores. Una ecuación que pretenden resolver en una próxima reunión antes de que se fijen los números y los objetivos para la campaña 2021/2022.

Hasta ahora la división económica entre el banco y su fundación era al 50%. En total, unos ocho millones de euros de inversión anual para mantener un equipo puntero en el baloncesto profesional español. Pero la cifras temporalmente no le cuadran a la fundación. La institución que preside Braulio Medel asegura en un comunicado que, por primera vez su historia, en el último ejercicio recibió cero euros de dividendo del banco cuando ésta es su principal fuente de financiación. En el presente, pendiente de que el Banco Central Europeo (BCE) pueda abrir la mano en septiembre, calcula que recibirá menos de diez millones como dotación. En total, unos 80 millones menos de su cálculo.

En ese escenario, la fundación sólo se compromete a sostener al deporte base, así como la cesión gratuita de sus inmuebles e instalaciones. Recuerda también que su Obra Social mantiene unos 500 empleos y hace depender su asignación final al deporte profesional a que el conjunto de Los Guindos elabore un presupuesto "serio y riguroso" y que contemple la influencia en los ingresos y en los gastos que causa la Covid.

En la presente temporada, Unicaja Banco necesitó hacer una aportación excepcional al equipo para compensar que la fundación rebajara su participación de unos 3.5 millones de euros a 600.000. La intención de la institución que comanda Medel es renovar esa misma cantidad para la próxima temporada o aumentarla si el BCE suspende las actuales restricciones. En todo caso, todo queda pendiente de las conversaciones. El banco, por su parte, desea que el dueño del Unicaja suba su aportación. La última temporada ha sido deficitaria. Sí que hay coincidencia en la necesidad de elaborar un proyecto deportivo realista, que se ajuste a las posibilidades económicas de sus dos mecenas y que elimine las sorpresas que puedan producirse durante la competición.