Unicaja - Barcelona: Como Will les enseñó (18:30)

El Unicaja, ante un buen desafío como es enfrentarse al líder de la Euroliga, en un partido de máxima élite en el Carpena, que olerá a noche grande en el reencuentro con el pívot

El Barça se quedó tirado en el aeropuerto

La plantilla, con Will Thomas, en el entrenamiento del viernes.
La plantilla, con Will Thomas, en el entrenamiento del viernes. / UNICAJABFOTOPRESS

Málaga/Con el aura de Will Thomas, jugador que insufló gen ganador a este vestuario y que alimentó una química única ahí dentro, gran patrimonio del Unicaja actual, al margen de títulos y victorias abundantes. Parte del proceso el de Baltimore "con el ejemplo y no con la palabra", hablaba Ibon Navarro de su legado en la previa de un Unicaja-Barcelona monumental en el Carpena (18:30 horas). Su parte poética que el homenaje a Will corra en este día; aquel concierto antológico en Badalona desde el poste bajo en los cuartos de final de Copa, que permitió derribar una psicosis ante los azulgranas e iniciar una etapa gloriosa que aún perdura, uno de sus mejores servicios en sus cuatro temporadas como cajista. Presencia que acompaña a la dimensión del partido, el mejor cartel actualmente en la ACB y algo más, por la onda que sigue transmitiendo el equipo malagueño, considerado de todas todas una alternativa consistente a Real Madrid y Barcelona, con la letanía que acompaña y presente, la brecha presupuestaria y estructuras de Euroliga, que en algún momento aplican su ley, pero se palpa esa cercanía más que nunca. No deja de trascender el Unicaja. "Es el equipo que hace mejor baloncesto en Europa", son palabras de Veljko Mrsic de este viernes. Una de tantas. Convivir con el halago y esa inclinación cada vez más fuerte, un ejercicio mental dentro de ese vestuario, que se ve capacitado de mirar a la cara a cualquiera.

Es una jornada 5 y octubre, pero hay interés en ver cómo se comporta el Unicaja ante un transatlántico, hasta ahora con un calendario amable (Girona, Granada y los ascendidos Coruña y Lleida), dentro de la dificultad de ir sacando victorias con una eficacia aplastante. 4-0 y la cuesta se empina, ahora con el Barça y un periplo de más de un mes lejos de Málaga. Existe ese colchón por si cae alguna derrota, el camino a Las Palmas está trazado. Ampliando las luces, este partido puede tener una trascendencia para más: meter al Barcelona (3-1) dos victorias a estas alturas sería una distancia interesante, pensando en cruces tanto en Copa y play offs. Cuentas que aparecen inevitablemente en el subconsciente, y con las referencias de la temporada pasada, que hasta el average general adquirió un valor enorme. Aunque Ibon dijera tras el Petkimspor que no se llegaba bien, difícil creer al técnico por las vibras que exhibe el equipo, de una oda baloncestística a otra. Está el técnico en ese papel de no alimentar unas expectativas desbordantes. Con las incógnitas de Kameron Taylor y Barreiro, heridos en BCL. Hicieron trabajo con el grupo estos días y se decidirá un par de horas antes. No Alberto Díaz, que parará unos días por el aductor, uno de los descartes.

Tocó las teclas precisas el Barça para dar un salto a un equipo aún en construcción, pero con madera clara de Final Four de Euroliga. En un casting variopinto en el banquillo, se escogió a Joan Peñarroya, una apuesta que suena bien tras el experimento fallido de Roger Grimau. Es líder de la Euroliga tras cinco jornadas (4-1), la última victoria ante el Asvel, y solo tuvo el lunar la pasada semana ante el Baskonia, donde perdió a Laprovittola, elemento importante en la generación. Merodea en el mercado a por un recambio, pero tiene elementos peligrosos por los cinco costados. Kevin Punter, de los grandes nombres de la Euroliga; un gran proyecto como Juan Núñez; el NBA Chimezie Metu (elegido tras caerse la opción Osetkowski) y Youssoupha Fall, talento y tamaño por dentro; más un jugador probado en la ACB como Justin Anderson, las cinco caras nuevas. Más todo el bloque de la temporada pasada. Con un Carpena a reventar (las entradas cayeron hace semanas), será tarde de Halloween en el Palacio, otro aliciente más en la tarde de Will Thomas, el que enseñó a afrontar estas veladas.

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