Unicaja, una inversión a medio y largo plazo

Los fichajes van adquiriendo más peso e integrándose progresivamente, parte del proceso de construcción de una versión distinta que diseña Ibon Navarro

"El Unicaja tiene todos los elementos para competir por los títulos"

Tyson Pérez remonta la línea de fondo.
Tyson Pérez remonta la línea de fondo. / ACB Photo / M. Pozo

“Si hacemos lo mismo nos van a pasar por la derecha y por la izquierda”. La frase la ha repetido varias veces Ibon Navarro desde que acabó la pasada temporada y pensaba ya en esta 2024/25. En el brillante preámbulo que ha permitido ganar dos títulos respetó aún algún mérito y jerarquía de la temporada anterior, pero ahora ya se trata de construir y moldear. Con una base y una idea de baloncesto bien sólidas de dos temporadas, pero hay que añadir matices y más riqueza para seguir creciendo a medio y largo plazo, aunque ello pueda costar alguna victoria en el corto.

En este proyecto 3.0 de la era Ibon hay tres piezas nuevas que ofrecen posibilidades extras y a los que ya se empieza a atisbar. Los tres son jugadores interiores y existe esa sobreabundancia ya muy tratada, pero también hombres de cualidades diferentes con los que hacer cosas distintas. De manera colectiva e individual.

Tyson Pérez fue el MVP cajista del partido ante el Girona. Además de una energía tremenda y una capacidad reboteadora produce sin apenas necesidad de consumir balón. Su capacidad para las caídas en los bloqueos o para jugar línea de fondo y aprovechar los espacios libres es valiosa en este equipo. 11 puntos, siete rebotes y 22 de valoración en apenas 16 minutos le endosó al Girona. Aún está algo perdido defensivamente, refería Ibon que aún se acostumbra a las normas defensivas del equipo, pero compensa con mucha actividad y esa capacidad para recoger rechaces, algo esencial en la filosofía de este equipo para imponer el ritmo de juego en el que está más comodo y correr. Buen detalle su 5/6 en tiros libres, faceta que a veces se le atraganta.

En el caso de Olek Balcerowski, sus sensaciones fueron buenas ante el Girona, mejor que sus números (no anotó el único triple que intentó, sumó tres rebotes y dos asistencias más un tapón). Defensivamente es un arma diferente a lo que había. Los otros cincos, Yankuba Sima y David Kravish, más el catalán quizá aunque el americano es un defensor bastante bien valorado por los técnicos cajistas aunque no sea tan vistoso, son jugadores valiosos para ser agresivos defensivamente en los flashes y los traps a los exteriores rivales. Pero la combinación de altura y movilidad del polaco puede ser letal defensivamente. No llega aún a las 10 sesiones de calidad con el equipo pero ya ofreció su destello en la semifinal de la Supercopa. Fue infiltrado, de hecho, para jugar la final pero las sensaciones no eran las mejores en su espalda y se decidió no forzar. El descarte perfilado era Sima si Balcerowski hubiera respondido al pinchazo y resultó que el gerundense hizo una final digna de MVP colapsando a Tavares. Da una idea de la profundidad y herramientas que tiene la plantilla cajista. Trabaja el polaco en su tiro. Será frecuente verle tirar triples, tras el partido ante el UCAM miró al banquillo para celebrar uno y explicó que era para Ibon, que le estaba ayudando a recuperar su tiro. El año pasado tlanzó muy poco en Atenas. En sus dos últimas temporadas en el Gran Canaria, sin mucho volumen, estuvo por encima del 30% de acierto. Y su capacidad de pase desde el poste alto o en el short roll es canela en estático o en transiciones. Un mayor conocimiento mutuo con compañeros debe potenciar mucho esa faceta.

Killian Tillie, mientras, parece sufrir en ocasiones con el ritmo del partido, pero es parte del proceso de recuperación tras dos años sin continuidad física. Existe el lógico respeto de ver cómo reacciona a la carga de entrenamientos y partidos y de momento no va mal. Es frecuente verle con las bolsas de hielo en las articulaciones, pero va adquiriendo una rutina de trabajo y debe ir hacia arriba. Ante el Girona hizo números con el partido avanzado (nueve puntos, tres asistencias y dos rebotes). Quizá esa falta de piernas penaliza el porcentaje de triples pero su tacto en la corta y media distancia es excelente, así como su visión de juego. Pívot que compartan bien el balón y abran el campo suelen garantizar fluidez. Defensivamente también está en proceso de conocimiento y aún no llega donde debe siempre pero es inteligente.

Son algunas primeras impresiones de los nuevos, Ibon los mete en dinámica aunque ahora quizá pudiera ser más fiable tirar de los ya conocidos. Pero es necesidad de hacer cosas distintas para progresar tiene su riesgo. Y su atractivo. 

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