Will Thomas, la leyenda regresó al Carpena

Will Thomas, leyenda viva del Unicaja, volvió a pisar el Carpena tras anunciar su retirada el pasado verano. En un homenaje sentido, emocionante y a la altura del legado del carismático pívot de Baltimore, que volvió a experimentar el “Will, Will, Will” en el Palacio. 248 partidos con la camiseta verde y morada, el tercer extranjero con mayor participación, en dos etapas donde dejó huella. En un lenguaje corporal de no expresar demasiado, forma parte de su personaje, Thomas cumplió aquello que dijo el viernes al llegar a Málaga: fotos, firmas y haciendo ese esfuerzo, pero una forma de descubrir la cara más suelta del americano, que llegó a Málaga en 2022 con otro carácter. Hasta dos horas antes del Unicaja-Barça, el centro del mogollón en los aledaños del pabellón. Decenas de aficionados se acercaban a Thomas a por una fotografía, hasta sujetando bebés y el móvil para cazar el selfie.

Paseando por los alrededores de la pista durante la última rueda de calentamiento y atendiendo peticiones. Se encendió el Carpena cuando arrancó el acto, una ovación cerrada con más de 10.000 espectadores cajistas en pie, uniforme el “Will, Will, Will”, ese grito de guerra que formó parte del envoltorio del Unicaja en las dos últimas temporadas en casa. El más resonante de todos, cómodo Will Thomas en el centro de la escena, devolviendo los aplausos, también de la plantilla del Barça. Un vídeo de sus mejores momentos como cajista, con la Copa de Badalona como culmen. Emocionados los jugadores del Unicaja, ojos llorosos en Ibon Navarro, soportando la tensión de un partido importante minutos después. Recibió una camiseta de Carlos Cabezas y Berni Rodríguez, embajadores del club, previo a la foto de familia con la plantilla, a la que se incorporó Darío Brizuela, en un gran gesto del donostiarra, quien recibió cariño durante la presentación. Regresó la leyenda, sombra permanente desde que se marchó a su Baltimore en junio.