Muere un piloto en un accidente de avioneta en el aeródromo de Vélez-Málaga

Un piloto acrobático ha fallecido este sábado a sus 49 años tras sufrir un accidente mientras dirigía una avioneta en Vélez-Málaga. Aunque hasta el lugar ha sido movilizada una UVI móvil, los sanitarios no han podido hacer nada para salvar la vida. El fallecido, Oliver Frutos, era instructor acrobático en el Real Aeroclub de Málaga y una figura "muy presente" en el Aeródromo de La Axarquía.

Minutos antes de las doce y media, el servicio de Emergencias 112 Andalucía ha recibido varias llamadas que alertaban de un accidente aéreo. Los testigos solicitaban asistencia sanitaria urgente, pues indicaban que el piloto de la avioneta, que participaba en una exhibición con motivo de la festividad de la patrona de la aviación, Nuestra Señora de Loreto, en el aeródromo Leoni Benabú, se había estrellado y se encontraba atrapado.

De inmediato, el centro coordinador ha movilizado al Centro de Emergencias Sanitarias 061, a efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos (CPB) de Málaga, Policía Local de Vélez-Málaga, Guardia Civil, Protección Civil, el Centro de Control de Tránsito Aéreo y el de Coordinación y Rescate. Serán los investigadores los encargados de esclarecer las causas del accidente que, por el momento, se desconocen.

Oliver, "una figura importantísima" en el Aeródromo de La Axarquía

Oliver Frutos estudió en el centro de formación aeronáutico para tripulantes de cabina Aerodynamics Academy y ejercía como instructor en el Real Aeroclub de Málaga, donde era "una figura importantísima". "Todo el mundo preguntaba allí por él". Y es que, aseguran algunos de sus allegados a este periódico, para que un piloto pudiera alquilar una avioneta en el Aeródromo de La Axarquía, antes, "tenía que pasar por sus manos, él acompañaba a esa persona para enseñarles las particularidades de esa avioneta".

Su pasión era la aviación y, es por ello, que decidió dejar la empresa de aires acondicionados que regentaba para dedicarse de lleno a pilotar. "Siempre que había alguna festividad, él se ofrecía a hacer acrobacias con la avioneta para completar el acto", como en el Crossroad Motor Festival, una exposición de coches, motos y bicis que se celebra en Alcalá de Guadaíra. La organización ha lamentado, a través de redes sociales, la pérdida de Oliver, que realizó una exhibición aérea en la última edición. "Nuestro corazón está con sus allegados y familiares. Mucha fuerza a todos. Ahora vuela más alto, más rápido, más lejos... demasiado para poder verlo ni sentirlo, pero todos le daremos alcance algún día, eso es seguro. Entretanto, levantemos una copa al cielo. Descansa en paz. Vuela alto, piloto".

El Festival Aéreo Internacional de Torre del Mar se ha sumado también a las condolencias por el accidente mortal. "Que todo nuestro afecto, el de nuestros amigos y seguidores arrope a su familia y a sus seres queridos en estos durísimos momentos. Cielos azules Oliver, descansa en paz", han publicado en Facebook.

El último accidente aéreo mortal ocurrió en noviembre de 2021. El suceso, en el que perdía la vida el copiloto, se produjo alrededor de las 17:30 en el aeródromo Leoni Benabú, en las proximidades de las pistas, concretamente, en un campo de aguacates de El Trapiche. Según las fuentes consultadas en su momento, tuvo lugar en el momento de despegue del aparato. La aeronave, una avioneta Bücker que no pudo remontar el vuelo, la pilotaba un socio del Real Aeroclub de Málaga que tiene su sede en dicho aeródromo que fue trasladado en un primer momento por efectivos de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias.

Desde el Servicio de Emergencias 112 dieron la voz de alarma desplazándose hasta el lugar de los hechos Policía Local de Vélez-Málaga y efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos. Estos tuvieron que asegurar un cable para que pudiese acceder a la zona la comitiva judicial.

El 11 de octubre de 2020 también fallecía un joven malagueño de 26 años tras despegar en el mismo aeródromo. Estaba acompañado por otra persona, de su misma edad y de nacionalidad alemana, que tuvo que ser trasladado al hospital por heridas de gravedad. Al parecer, el piloto, tras levantar el vuelo, alertó a la torre de control de que se sentía indispuesto. Fuentes del Real Aeroclub de Málaga explicaron entonces que la aeronave comenzó a hacer orbitaciones a 500 o 600 metros aproximadamente de la pista, y a bajar en espiral precipitándose muy cerca de donde se encuentran los angares.