Vélez-Málaga solicitará una prórroga de un año a las medidas pesqueras acordadas en Bruselas

Vélez-Málaga/El acuerdo alcanzado en Bruselas sobre las cuotas para la pesca de arrastre en 2025 ha generado un gran revuelo. Los pescadores se manifestaron tras el recorte de días de faena del 79%, proyectado por la Comisión Europea, que había puesto sobre la mesa reducirlos de 130 a tan solo 27. Tras esto, el Consejo de Ministros de la Unión Europea tomó una decisión salomónica al hacer efectivo el recorte y a la vez brindar la posibilidad de ganar días si toman ciertas medidas para aumentar la sostenibilidad. Así, para ganar tiempo, el próximo Pleno Ordinario de Vélez-Málaga debatirá una moción para que se reconsidere el período de un año de moratoria.

El alcalde de Vélez-Málaga, Jesús Lupiáñez, se ha reunido con la presidenta de la Cofradía de Pescadores de Caleta de Vélez, Mari Carmen Navas, para abordar "la difícil situación a la que se enfrenta el sector pesquero tras las últimas medidas impuestas por Europa". El regidor, junto al teniente de alcalde de Caleta, David Segura, ha expresado "su apoyo incondicional a los pescadores y su compromiso de trabajar junto a ellos para encontrar soluciones que protejan su actividad y garanticen el sustento de las familias que dependen de este oficio".

En ese encuentro, Lupiáñez ha confirmado que "hemos presentado una proposición a la comisión correspondiente, que irá a Pleno en este mes, en la que instamos al Gobierno de España y a la Unión Europea a que reconsidere ese período de un año de moratoria, de cara a que a lo largo de ese tiempo se puedan establecer con mayor claridad todo lo que aparecen en los informes de la Junta de Andalucía y otras entidades", ha explicado el alcalde de Vélez-Málaga.

El regidor ha considerado muy importante valorar "lo que los pescadores han hecho en estos años anteriores, especialmente en la Caleta, en donde se ha trabajado para mejorar la sostenibilidad y en las capturas".

Exactamente, los pescadores del municipio elaboran sus propias cuotas para respetar la cantidad, así lo explica José Manuel Molina, dueño de dos barcos: "En Caleta hubo una época en donde había muchas bacaladillas, nosotros establecimos un máximo de 50 cubas de unos 25 kilos y lo que sobraba se lo dábamos a asuntos sociales", ha aclarado el empresario, que además ha añadido que esto "lo hacemos siempre que es necesario".

La propuesta se votará en el próximo Pleno Ordinario del mes de diciembre, "esperemos que la decisión sea unánime y la podamos mandar", ha comentado Lupiáñez.