Un recurso insuficiente para 16 niños

Málaga/Una carta al Defensor del Pueblo y una denuncia en la Fiscalía de Menores. Los padres del CEIP Los Llanos de Álora pretenden seguir adelante con las medidas que pusieron en marcha cuando pedían un monitor para los 16 niños con discapacidad escolarizados en este centro, el único del municipio que dispone de atención integral a la diversidad, según la Junta de Andalucía. El pasado 16 de octubre, cinco semanas después del comienzo de curso, llegó al colegio la monitora comprometida por la Delegación Territorial de Educación. Pero las familias consideran "insuficiente" el recurso. Estiman que con una persona que, además, está contratada por una empresa externa y no forma parte estructural del centro, no se pueden cubrir las necesidades de estos niños, 12 de ellos integrados en aulas ordinarias y siete de tan solo 3 años de edad.

En las dos líneas de 3 años conviven con el resto de sus compañeros alumnos con síndrome de down, hemiparesia, retraso madurativo, trastornos graves del desarrollo, síndrome hipóxico-isquémico, autismo y trastornos de conducta y grados de discapacidad que alcanzan el 40%. También hay tres escolares en 4 y 5 años, un alumno en tercero de primaria y dos en cuarto, uno de ellos con discapacidad sensorial auditiva y problemas de conducta graves con un grado del 66%. Esto al margen del aula específica con cuatro alumnos gravemente afectados.

"Un monitor de integración no está sólo para llevar a los niños al cuarto de baño, dentro de sus funciones está la integración social y aunque intentan adaptar el horario a todos los niños lo vemos totalmente insuficiente", considera Juan Moreno, portavoz de las familias afectadas. "Estos niños tienen que trabajar con maestras de Pedagogía Terapéutica y de Audición y Lenguaje , la mayoría están en atención temprana y se tienen que hacer compatibles los horarios, lo cual vemos inviable", agregan las familias. Tampoco les satisface que sea una empresa la que suministre el servicio porque de esta forma es "volátil" y lo tendrán que solicitar cada año. "Estos niños tienen que estar 9 años en el colegio y el curso que viene volveremos a tener el mismo problema, que el contrato se hará a mediados de octubre o en noviembre, esto no puede ser", subraya el portavoz.

Mañana viernes tienen pensado registrar la carta al Defensor del Pueblo con las firmas de las familias de estos 16 escolares. Y la próxima semana llevarán su denuncia a la Fiscalía de Menores. "Nos encontramos con un incumplimiento sistemático de todas las leyes y planes", dice Juan Moreno. "Se habla de inclusión y de unos derechos que no se están cumpliendo, queremos que se estabilice esa cuestión y que no estemos en junio otra vez con el problema, el curso que viene hay previsto que se escolaricen otros dos niños más de 3 años, y no te dejan matricularlos en otro centro porque éste es el que tiene los recursos, pero esos recursos son insuficientes", agrega el portavoz de las familias.

Los padres también apuntan que "somos conscientes de que no puede haber 12 monitores, pero sí tiene que haber la atención que los niños se merecen y que está reflejada en sus dictámenes de escolarización". El equipo de orientación educativa de la Delegación de Educación elabora los informes que acompañan a estos alumnos en su estancia en el centro. Por ello, las familias subrayan lo ilógico que es no tener unos recursos que la propia administración determina en sus dictámenes. También apuntan que estos informes se elaboran en el proceso de escolarización, en los meses de marzo y abril y los conocen los centros con la matriculación de los solicitantes en junio, por lo que no entienden que la falta de monitor se produzca en septiembre ocasionando un problema para estos alumnos.

Desde la dirección de este centro educativo de Álora declinaron hacer cualquier tipo de declaración al respecto de este tema.