Persán sigue rompiendo marcas. La empresa sevillana propiedad de la familia Moya Yoldi batió su propio récord de facturación en 2023 al fijar su cifra de negocio en 811 millones de euros, según comunicó la propia compañía. 

Esta nueva marca de la  multinacional sevillana, que es líder europeo en la producción y comercialización de detergentes y suavizantes, supone un aumento respecto al ejercicio anterior de un 22%, confirmando su senda de enorme crecimiento en los últimos años, en los que a la fábrica sevillana unió una planta en Polonia y otra en Francia. 

En concreto, la propia compañía familiar que preside Concha Yoldi y que tiene como CEO a Antonio Somé enfatizó este jueves que, en los últimos cuatro años, ha triplicado sus ingresos, toda vez que en 2019 su facturación al cierre del año fue de 290 millones de euros, una cifra que elevó hasta los 423 millones un año más tarde, en 2020. Al ejercicio siguiente rebasó la barrera de los 500 millones de euros –el dato concreto de 2021 fue de 503 de ingresos–, y el pasado ejercicio de 2022 lo cerró en 665 millones, que certifica ese incremento del 22% en 2023.  

Persán detalló ayer al dar a conocer sus resultados del ejercicio anterior que esa cifra de negocios récord de 811 millones la ha permitido obtener en el último ejercicio un Ebitda de 55 millones de euros, frente a los 26 de 2023. Esta duplicación del beneficio de explotación ha supuesto para el grupo poder recuperar “lo perdido en los años 2021 y 2022 por la coyuntura inflacionaria en el mercado de las materias primas y la energía”, según resaltó Persán. 

El crecimiento del negocio de la compañía se produce gracias a que en 2023 aumentó las ventas de todas sus categorías de productos.  

Por ello, Persán recalcó este jueves que sus resultados afianzan su liderazgo europeo en cuidado del hogar y elevan su cuota de negocio en el sector del cuidado personal.  

El salto al exterior sustenta este crecimiento constante en el último lustro. “El plan de internacionalización de la empresa iniciado en 2019 ha contribuido a este progreso al favorecer la llegada de sus artículos a los cinco continentes”, precisó Persán en un comunicado. 

El CEO de Persán, Antonio Somé, valoró los resultados del ejercicio 2023: “Continuamos acercándonos al objetivo propuesto hace unos años de ser una empresa one billion”, esto es que supera los mil millones de facturación. 

Antonio Somé, CEO de Persán.

"Tenemos que estar satisfechos de los resultados obtenidos”, agregó Somé, quien por esta razón felicitó a los empleados de Persán y agradeció su “ayuda a todos los stakeholders” (individuos y organizaciones que tienen impacto en el desempeño de la compañía).  

“Seguimos enfocados en nuestros objetivos a largo plazo y ya estamos elaborando el Plan Estratégico para los próximos tres años que consolidará nuestro liderazgo en Europa y nos expandirá a otras geografías”, concluyó Somé al valorar el resultado récord de 2023. 

Inversión en las fábricas 

Este incremento del negocio se ha compatibilizado con una política inversora por parte de la compañía familiar en todos sus centros de producción. De hecho, Persán reiteró este jueves su “compromiso con el desarrollo de sus fábricas de Sevilla, Polonia y Francia”.  

Así, la empresa explicó que, en el año 2023, invirtió un total de 46 millones de euros. Entre esas inversiones destacó la finalización y puesta en marcha de la nueva planta de Wróblowice, en Polonia, y la construcción de la nueva fábrica de botellas de Sevilla.  

En los últimos tres años la inversión para la modernización de sus centros de trabajo ha superado los 100 millones de euros. 

Sostenibilidad 

Persán recordó al dar a conocer sus resultados récord que sigue apostando por la sostenibilidad con un enfoque global ESG (responsabildiad medioambiental, social y de gobierno corporativo por sus siglas en inglés). Esta estrategia ha permitido implantar políticas de desarrollo que revierten en el bienestar de sus empleados y de su cadena de valor, un modelo de gobernanza que integra la sostenibilidad en el día a día de la empresa y la inversión en tecnologías que reducen su huella ambiental.  

El esfuerzo de la compañía en este apartado le ha servido para renovar el ‘Sello Reduzco’. Este distintivo es otorgado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico del Gobierno de España y reconoce a entidades que han logrado una disminución sostenida de su huella de carbono. En el caso de Persán dicho Ministerio avaló que sus emisiones se redujeron en un 14% en un trienio.  

Labor social 

Desde el lado social, la Fundación Persán conseguió 122 inserciones laborales de personas desempleadas. La inserción laboral es la prioridad de la entidad social constituida en 2006 por la multinacional sevillana de origen familiar, una “acción social directa contra la pobreza y la promoción de valores”.  

Para Persán, entre las acciones llevadas a cabo el pasado año, sobresale el comienzo de la fase de emancipación del Centro de Educación Integral-Persán (CEI-Persán).