Se ha llevado a cabo una reforma del sistema del subsidio por desempleo, por parte del Ministerio de Trabajo y de representantes sindicales, pero sin el apoyo de la patronal. El subsidio por desempleo es una ayuda financiera no contributiva que se da actualmente por 30 meses meses, pero bajo ciertas condiciones como la edad o la insuficiencia de cotizaciones previas. La cantidad base de la ayuda es del 80% del IMPREM, o en otras palabras: 480 € al mes. La reforma que se ha llevado a cabo tiene medidas como son la compatibilidad entre el cobro del subsidio y un empleo, o la reintroducción de la sobrecotización para las personas que sean mayores de 52 años.

En nuestro país son aproximadamente 765.884 personas las que se benefician de este subsidio. La inversión anual del SEPE es de alrededor de 530 millones de euros. La comunidad que más se benefician de este subsidio son Cataluña, Madrid, Madrid, Andalucía y la Comunidad Valenciana.

¿Qué cambios hay?

Lo que se ha propuesto recientemente, es un incremento en la cuantía del subsidio en los primeros seis meses. Este aumento supondría del 80% al 95% del IMPREM, y tras los 12 meses volvería al 80%. Para todos aquellas personas que tengan más de 52 años, el subsidio por desempleo seguirá siendo del 80% del IMPREM.

Más personas beneficiadas

Una de las buenas noticias de la reforma de este subsidio es que ahora hay más personas que van a tener acceso a él, como por ejemplo los menores de 45 años sin carga familiares, los trabajadores agrarios eventuales, las personas transfronterizas de Ceuta y Melilla, y víctimas de violencia de género. No solamente esto, sino que también se permite la compatibilidad de subsidios agrarios con los del régimen general y esto beneficia a comunidades como por ejemplo Extremadura y Andalucía.

A partir del año 2025 los beneficiarios van a poder compatibilizar la prestación con el empleo, aunque con una condición: los ingresos no pueden superar los 18.900 € anuales. En un principio, y durante los seis primeros meses, la ayuda será del 80% del IMPREM, y poco a poco se irá reduciendo hasta el 15%, cuando finalicen los años de compatibilidad.

En cuanto al acceso al subsidio, se soluciona un problema que había y ya no hay que esperar un mes para solicitarlo tras agotar la prestación contributiva. No solamente esto, sino que también será posible compaginar el subsidio con otras ayudas como el Ingreso Mínimo Vital y la Renta Activa de Inserción.