La comisión para el seguimiento de la sequía vuelve a reunirse este martes para analizar las restricciones aprobadas hasta ahora después de que en Málaga las últimas lluvias han aumentado las reservas en los pantanos desde el Domingo de Ramos en casi 50 hectómetros. Cabe recordar que en los últimos Comités de sequía, los expertos andaluces impulsaron un tope máximo de consumo en 160 litros por habitante y día para la Costa del Sol, Axarquía y la capital,  aprobaron que solo se autorizara el llenado de  piscinas públicas municipales, turísticas, de clubes deportivos o sociales, aquellas que se destinan a fines terapéuticos en centros sanitarios y prohibieron el llenado de piscinas privadas y comunitarias en Málaga.

Actualmente, los siete embalses de Málaga suman algo más de 162 hectómetros y están el 26,6% de su capacidad total, algo que llevaba sin presenciarse mucho tiempo. En febrero la situación era totalmente diferente y la Comisión de Gestión de la Sequía de las Cuencas Mediterráneas Andaluzas, tras analizar la situación, decidió incrementar las medidas de ahorro del consumo de agua. En marzo sucedió prácticamente lo mismo y prohibieron el llenado de piscinas privadas. En aquel momento, el secretario general de Agua de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Ramiro Angulo, incidió en que volverían a reunirse pronto para “evaluar la situación hidrológica considerando las aportaciones que siguen llegando a los embalses, así como por las posibles precipitaciones que se espera que tengan lugar durante esta próxima quincena”. 

Entre las limitaciones que se acordaron y que están vigentes se encuentra, como norma general, la prohibición de uso de agua potable para baldeo de calles, llenado de piscinas privadas, riego de jardines, parques públicos y privados, campos de golf, lavado de coches fuera de los establecimientos autorizados, fuentes ornamentales que no dispongan de circuito cerrado de agua, duchas y surtidores públicos en los sistemas declarados de excepcional sequía y escasez grave (Costa del Sol Occidental, Guadalhorce-Limonero y Axarquía-Viñuela). Esta misma medida se adoptó también en las zonas sin regulación de la cuenca del Río Guadiaro, la cabecera del Guadalhorce, la cuenca baja del Guadalhorce y la sierra de Tejeda-Almijara y Alberquilla. 

En esta reunión cabe destacar que cabe la posibilidad de que se produzca alguna reducción de las medidas de ahorro tanto en la cuenca del Guadalete-Barbate como en las Cuencas Mediterráneas, puesto que la Junta explicó, tras lo establecido en el último comité, espera que las comisiones ya contaran para este encuentro con los elementos de juicio suficientes para valorarla. 

La prohibición del llenado de piscinas ha hecho que empresarios de diferentes sectores se unan para pedir que se suavicen las restricciones porque sin piscinas y jardines no pueden trabajar y tienen miedo de quedarse sin trabajo y sin empresas. Actualmente, en la provincia de Málaga hay 78.606 piscinas, según los datos del catastro. Su apertura comienza a plantearse en febrero porque las comunidades de vecinos empiezan a reunirse para ver qué deben hacer para ponerlas a punto para la temporada de verano. Además, en Semana Santa algunas urbanizaciones empiezan a abrir sus piscinas algunos días y ya a partir de junio lo hacen a diario.  El año pasado hubo urbanizaciones que tuvieron que cerrarlas, sobre todo en la Axarquía, porque no podían permitirse cubas de agua para mantenerlas abiertas.