La obra del Metro de Málaga en la Alameda suma más retraso y aumenta su coste

Málaga/Los trabajos de construcción del Metro de Málaga en la Alameda Principal siguen acumulando meses de retraso sin que a día de hoy exista una previsión oficial de cuándo estarán rematados. Una muestra de la significativa variación entre la realidad y las previsiones originales de la Consejería de Fomento es que el ente autonómico acaba de dar luz verde a la cuarta prórroga del contrato de ejecución de la infraestructura ferroviaria y de la superestructura de vía, aplazando al próximo 19 de febrero el nuevo hito temporal. Una fecha que, conforme al avance de las actuaciones, tendrá que ser nuevamente alterado.

Estas dos fases del tramo Guadalmedina-Atarazanas, de apenas 295 metros de longitud, fue adjudicado a la UTE integrada por Acciona y Sando a finales de marzo de 2015. La realidad dista sustancialmente de estas previsiones. El plazo comprometido fue de 28 meses. Es decir, el objeto del contrato tendría que haber quedado concluido a finales de 2017. Por el contrario, dos años y medio después de esa fecha, los trabajos siguen su marcha bajo tierra, después de que haya quedado completada la reurbanización del lateral norte (salvo la parte donde se localiza la rampa de acceso al túnel, en el cruce con Puerta del Mar).

El incumplimiento formal del calendario no es el único que se observa en esta pieza del suburbano. Ocurre otro tanto con la parte económica. La oferta seleccionada por la Agencia de Obra Pública de Andalucía situaba en unos 26,6 millones de euros el coste de todos los trabajos relacionados con la obra civil (excavación del túnel, estación Atarazanas y la colocación de la superestructura de vía), quedando para otro contrato (en fase de evaluación de ofertas) las instalaciones y la arquitectura.

Una de las particularidades de la selección final fue la enorme baja económica propuesta por Acciona y Sando (una tendencia común en buena parte de los grupos que optaron al concurso). Sin embargo, en el transcurrir de los poco menos de cinco años transcurridos desde la formalización del contrato, se han sucedido tres proyectos complementarios y cuatro prórrogas que han incrementado el valor de las actuaciones en casi 12 millones de euros (IVA incluido).

A modo de conclusión, la factura que deja la obra del tajo del Metro en el centro se sitúa ya en casi 39 millones (añadiendo el incremento de coste de reurbanización al extenderse la peatonalización del lateral norte de la Alameda hasta la calle Larios).

La última prórroga, formalizada el pasado martes, no sólo extiende el periodo temporal de ejecución, sino que lleva aparejado un aumento económico de 536.016 euros (IVA incluido). De las cuatro alteraciones, sólo dos han tenido incidencia sobre los costes. Esta última y la segunda, que supuso un añadido superior a los 2,1 millones.

Pero a estas hay que añadir los complementarios derivados de la ejecución. El primero de ellos tuvo lugar a mediados de 2016 (poco más de un año después de la formalización del proyecto), con un incremento de 1.390.703 euros con los que sufragar los cambios en los servicios afectados en esta parte del recorrido.

El segundo data de octubre de 2017 y tiene como protagonista los trabajos arqueológicos ejecutados en esta parte de las obras. Es además el más cuantioso de todos los abordados, superando los 5,6 millones de euros. Con esta suma se costearon las medidas correctoras y de consolidación del muro perimetral del Fuerte de San Lorenzo, declarado Bien de Interés Cultural (BIC).

El tercero y hasta la fecha último complementario en esta pieza tuvo como objeto la afección al embovedado de Calle Carretería en p.k. 0+137, con un valor de 2.252.052 euros (incluido el IVA). Finalmente fue la Junta la que asumió la financiación de la reposición de esta estructura, a pesar de que inicialmente se negó a ello por ser una nueva intervención.