Así crecen las nuevas torres de Málaga

Málaga/La Málaga de las torres empieza a crecer y tomar forma. Del dibujo que los urbanistas imaginaron sobre plano en el actual planeamiento, vigente desde hace casi una década, a la realidad del ladrillo y del cemento. Ahora son grúas de decenas de metros las que se levantan sobre el espacio que en pocos años serán ocupados por bloques de hasta 30 plantas, configurando el nuevo skyline de la capital de la Costa del Sol.

El bullir incesante de camiones se repite en tres localizaciones de la ciudad, tres puntos estratégicos, emblemas de la pujanza inmobiliaria de Málaga y de su conversión en foco de atracción para fondos de inversión nacionales e internacionales.

En el litoral oeste, junto a la parcela de Térmica, que sigue esperando su momento; en el barrio de la Princesa, cerca del soterramiento de las vías del ferrocarril a su entrada en la urbe, y en el emplazamiento del antiguo rastro, en Martiricos. Todos ellos terrenos sobre los que sembrada la semilla empiezan a formarse las raíces sobre las que se levantarán estos inmuebles.

Cronológicamente, la primera de las operaciones en ponerse en marcha fue la de las torres de Martiricos. Dos edificios de 30 plantas de altura, con capacidad para un máximo de 450 viviendas. La más al sur tendrá 252 pisos en venta, cuya forma de Y favorecerá las vistas y facilitará la ventilación e iluminación natural de los apartamentos. La emplazada al norte, con forma de T, contará con 198 viviendas en alquiler y un conjunto hotelero desde la primera planta hasta la decimotercera.

La inversión vinculada a ambas edificaciones, según datos de la promotora, AQ Acentor, brazo inmobiliario del grupo de inversión Aquila, alcanza los 80 millones de euros. Sin embargo, el valor real de la iniciativa se dispara hasta los 180 millones si se incluyen los conceptos relativos, por ejemplo, a la compra de los terrenos.

El siguiente proyecto en ser activado, el pasado mes de abril, fue el de la Princesa, también con AQ Acentor como responsable. El bautizado como Parque Princesa se asienta sobre un antiguo y obsoleto polígono industrial localizado en las calles Santa Rufina y San Lucas.

Ahora pasará a ser un barrio de nuevo cuño, en el que se prevé una inversión próxima a los 84 millones. Tres son las torres contempladas en este sector, una de ellas de 22 plantas sobre rasante (unos 80 metros en vertical); las otras dos, de 14 niveles (53 metros estimados). Todas darán acogida a 350 viviendas en régimen de alquiler.

Entre las características del diseño, la apuesta por la sostenibilidad, ya que contarán con fachadas prefabricadas, aislamientos de última generación y estarán dotadas de sistemas de climatización de la máxima eficiencia (aerotermia), luces led, carpinterías con rotura de puente térmico y vidrios bajos emisivos, entre otras medidas.

La última de las actuaciones residenciales acometidas se sitúa casi en la parte final de litoral oeste de la capital. Tres torres de 21 plantas, diseñadas por el estudio de Carlos Lamela, sobre un sector llamado Torre del Río. Dos son promovidas por Metrovacesa, la tercera por Sierra Blanca.

Justamente, esta misma semana se tuvo conocimiento de que Sierra Blanca había obtenido la licencia de obras para poder arrancar en breve su edificación, con capacidad para 71 viviendas, un local comercial, dos oficinas, equipamientos, piscinas privadas y comunitarias, y dos sótanos que contendrán 72 trasteros y 167 plazas de aparcamiento. De ellas, 140 vinculadas a las viviendas y 23 a otros usos. La ejecución material del complejo se estima en unos 7,7 millones de euros.

Con este paso adelante sigue la estela de Metrovacesa, que el pasado mes de abril puso en marcha la maquinaria sobre la parcela para levantar uno de sus dos inmuebles. Los plazos que se manejan apuntan a que en ambos casos las construcciones, que dibujan una nueva fachada litoral de la ciudad, podrían estar concluidas a mediados de 2023. De acuerdo con los detalles de los que informó la promotora, la materialización de las dos torres van a suponer una inversión (incluyendo todos los conceptos) de unos 138 millones de euros.

Estas tres operaciones son la punta de lanza del urbanismo en vertical planificado en la capital de la Costa del Sol. Marcan el camino que tendrán que seguir otras actuaciones también perfiladas en los antiguos suelos de Repsol, con cuatro torres, una de ellas de 35 plantas;Térmica, con un desarrollo de menor dimensión en altura, y el polígono de San Rafael.

Inmuebles a los que sumar la torre del puerto, promovida por un grupo de inversión catarí, pero sobre ciernen ciertas dudas tras la decisión del Ministerio de Cultura de abrir un expediente informativo para analizar su posible impacto sobre el paisaje de la ciudad.